Si de verdad quieres viajar a cualquier parte del mundo, por poco dinero de forma sostenible, una forma efectiva es usar la mochila como aliado. También existen viajes baratos con maleta, pero la libertad y flexibilidad que te proporciona esta manera de llevar tus enseres personales es mucho mayor. Sin embargo, al no disponer de un espacio muy amplio, hay que valorar muy bien qué podemos llevar y qué no en ella. En este artículo te vamos a ayudar a saber cómo realizar viajes con mochila para disfrutar de experiencias increíbles por muy poco.
Qué mochila llevar para viajar ligero
Esto dependerá mucho de las necesidades de cada uno. Aun así, hay que tener en cuenta ciertos criterios como que tenga las medidas y el peso estimados por la compañía para poderse subir a cabina. Normalmente, la mayoría de aerolíneas permiten una maleta de cabina de entre 8 a 12 kg de peso, con la excepción de Ryanair, que no lo permite a menos que se pague un suplemento de 6 € a la hora de hacer la reserva, u 8 € en el momento de embarcar.
Con este tipo de equipaje, no será necesario pasar por cintas transportadoras, ni esperar a recoger el equipaje y el tiempo que eso conlleva.
Cómo organizar la ropa en los viajes con mochila
Existen maneras de organizar la ropa para que nos quepa todo en una maleta de mano o mochila grande. Solo es cuestión de saber colocarlas de forma eficiente.
- Conseguir organizadores de ropa. Algunos modelos de organizadores permiten comprimir las prendas de ropa de tal modo que pueda caberte todo sin quebrarte la cabeza. Podemos encontrarlos en diferentes modelos y con variedad de precios.
- Intentar no llevar demasiados pantalones y camisas, después de todo, se podrán lavar en el destino (en la mayoría de casos).
- La ropa interior sea de tejido fino y con rápido secado ocupan menos espacio si está correctamente enrollada y comprimida.
- Enrollar los calcetines para que no ocupen mucho espacio.
- Si es invierno en el destino a donde vamos de viaje, es conveniente llevar ropa de abrigo que no abulte ni pese demasiado. También se puede emplear el truco de “capas de cebolla” donde podremos llevar varias capas de prendas puestas y no una sola para que podamos llevar más encima y menos en la maleta.
Organizar un botiquín
Siempre es bueno contar con un neceser “botiquín” por lo que pueda surgir en el destino vacacional o de viaje. En este sentido, aconsejamos que metamos las pastillas en bolsas de plástico con cierre hermético y evitar añadir cajas, prospectos, botes grandes que ocuparán mucho espacio. De igual modo, es mejor llevar lo esencial, si necesitamos algún elemento extra como vendas, yodo, algún tipo de crema, siempre podremos obtenerlo en el lugar de destino, en la mayoría de casos.
Qué llevar en el neceser personal
Con experiencia de viajes a las espaldas, al final aprendemos qué llevar y qué no según los días que viajemos y el destino al que vayamos. Aunque siempre hay elementos que hay que llevar sí o sí. Por ejemplo, un bote de dentífrico de 50 cc es más que suficiente para lavarnos los dientes durante un mes y un desodorante por el mismo tamaño durar 2 meses, entre otros.
Pero, a grandes rasgos, podemos seguir estos consejos para evitar ocupar demasiado espacio en el neceser:
- Meter champús y geles en botes rellenables de diferente tamaño según el destino donde vayamos. Después de todo, es inútil llevar los envases originales enteros si solo van a ser unos días y ocuparán demasiado espacio.
- Incluso podremos prescindir de botes de champús, ya que los hoteles suelen añadirlos en los baños de las habitaciones.
- Es mejor llevar una pastilla de jabón para el cuerpo que un bote de gel.
- También podemos añadir muestras de cremas, hidratantes, dentífricos, etc. son un método recursivo y no ocupan apenas espacio.
Qué calzado tenemos que llevar en los viajes con mochila
En este sentido, tenemos que tener en cuenta 2 cosas, que son el clima y el tipo de viaje que vayamos a hacer. No es lo mismo ir de senderismo a Machu Picchu, visitar las pirámides de Egipto o hacer un viaje de negocios o turismo por Europa.
Como consejo, no llevar más de 3 pares de calzado y evitar los “por si acaso”.
- Si es en una zona cálida, podemos llevar zapatillas de loneta, sandalias abiertas y canchas para las duchas y que nos pueden servir también para la playa o la piscina.
- Si la temperatura de destino es fría, podemos emplear zapatillas de loneta, zapatillas deportivas y chanchas para la ducha.
- Si vamos a realizar trekking, entonces cambiaremos las zapatillas por unas de montaña.
- Si la duda es por qué no hablamos de zapatos de tacón, la respuesta es sencilla. Vamos de viaje mochilero, por lo que la posibilidad de ir de fiesta se reduce considerablemente. Aun así, se pueden meter también un par de zapatos planos tipo bailarinas o con tacón bajo, pero intentando que no ocupe demasiado.
Para que todos estos calzados ocupen poco espacio, podemos meterlos apretados y sujetos con una goma elástica de pelo o, bien, en pequeñas bolsas de tela ligera.
Viajes con mochila: ¿Y qué hacer con el resto de cosas?
Pero no solo llevamos ropa y enseres básicos, también podemos añadir otros elementos que nos pueden ayudar en momentos de descanso o de ocio:
Libros
Si eres amante de los libros en físico, puedes llevar uno, aunque no recomendamos más, puesto que ocupan bastante espacio y, después de todo, también pesan, por lo que a la hora de mover la maleta suponen más un lastre que una ayuda.
Pero si te gusta leer sea el método que sea, la mejor opción es leer libros electrónicos. Hoy en día, con las tables y smartphones es muy sencillo tener a mano el hábito de la lectura y sin que suponga un peso físico importante.
Guías de viaje
Las guías de viaje en formato físico también suponen un engorro, puesto que podemos encontrarlas con multitud de páginas y, después de todo, también ocupan espacio y tienen peso. Una solución es llevarlas en formato ebook en el smartphone. Incluso podemos escanear sus páginas y leerlas en formato digital. Pero, si preferimos algo físico, podemos sacarlas en papel y usar solo los fragmentos que sean de interés para el tipo de viaje o zona que vayamos a visitar.
Otros elementos
Por otros elementos nos estamos refiriendo a:
- Sacos sábana. Son útiles y funcionales en ciertos tipos de destinos y mejor que sean de seda, puesto que ocuparán menos y pesarán poco.
- Linterna. Es un recurso que podemos o no llevar con nosotros. Las de tipo frontal ocupan menos.
- Toallas de viaje que nos ayudarán en cualquier contratiempo.
- Otros como pañuelos de papel, costurero de bolsillo, bolígrafo y libreta pequeña, etc.
Todos estos elementos se pueden guardar en organizadores de maleta, ya que ayudará a comprimirlos y que ocupen poco espacio.
¿Y qué hacemos con la ropa sucia a lo largo del viaje?
Es una de las grandes dudas. Para meter la ropa sucia podemos emplear bolsas de plástico para irla guardando (para evitar mezclar las prendas de ropa sucia y limpia y los olores), así como bolsitas de tela ligeras. Si es unos días, es más que suficiente, pero si es por un largo tiempo, es mejor acudir a lavanderías en la zona de destino o si el lugar donde nos alojaremos dispone de lavadoras.
Desde Assegur te damos los mejores consejos para que puedas disfrutar de viajes con mochila. Podrá viajar de forma más ligera, con menor peso… y con mayor tranquilidad. ¿Cómo? Echa un vistazo a nuestro seguro de viaje.
