Dormir no solo es placentero, sino que es una necesidad real de nuestro organismo. Normalmente, tendemos a quitarle importancia a dormir lo suficiente por las noches, pero se ha demostrado que existe una relación muy estrecha entre un buen descanso y el bienestar de la salud.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), el bienestar total se consigue realizando una dieta equilibrada, haciendo deporte o ejercicio físico y disfrutando de un sueño de calidad y reparador. La falta de descanso repercute directamente en el bienestar de una persona, es por ello que se recomienda dormir al menos unas 7-8 horas al día.
En el caso de los niños, sobre todo aquellos que están en edad escolar, necesitan una cantidad mayor, entre las 10-12 horas de sueño sin interrupción. Puesto que dormir este tiempo les permite mejorar su rendimiento escolar, así como incrementar la capacidad de aprendizaje y la memoria.
Cuando descansamos, el cuerpo se recupera y “resetea”, es decir, el sistema inmune se fortalece, la memoria mejora, se reduce la inflamación del cuerpo, baja la presión sanguínea, la capacidad y concentración mental se incrementa y la energía corporal se recupera.
¿Cómo afecta al cuerpo un correcto descanso?
Se estima que pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo. Es un tiempo importante, pero lo que no sabemos es ¿Qué tiene de importancia dormir? Mucha gente no es consciente de los procesos que tienen lugar en el cerebro y el cuerpo durante ese tiempo de descanso. Y esto conlleva a que no sepan tampoco los beneficios de un descanso óptimo.
La salud física y un buen descanso
El cuerpo se sana y recupera mientras dormimos. El sueño mejora el proceso de reparación del cuerpo, ayudando a reducir la inflamación interna y rejuveneciendo el sistema inmune. Por ello, es esencial dormir bien al menos entre 7 a 8 horas al día, en el caso de los adultos.
A continuación, os presentamos 7 beneficios que tiene dormir bien a nivel corporal:
- Regeneración de la piel. A raíz de diversos estudios realizados, se ha demostrado que la piel, tras una óptima noche de sueño, se presenta más luminosa y tersa. Además, combate de forma más eficiente los daños producidos por agentes externos como son la contaminación, el sol o el viento.
- Peor humor. Dormir poco y mal tienen efectos negativos sobre las emociones. Elementos como la baja autoestima, la ansiedad o la depresión son consecuencia de no dormir correctamente durante mucho tiempo. Un buen descanso permite afrontar el día con más energía, positividad y humor.
- Mantener la forma física. La falta de sueño aumenta la fatiga y puede hacer que aumentemos de peso. Sin embargo, dormir bien mejora el tono muscular y tener un buen rendimiento al día siguiente.
- Sentidos mermados. Cuando hay cansancio, la capacidad de los sentidos disminuye. Descansar hace que puedas disfrutar más de todo lo que te rodea. Incluso no dormir merma la capacidad dialéctica y hace que el tono de voz sea más cansino y lento.
- Estrés. Cuando el sueño y su calidad no son suficientes, el estrés se agrava y puede causar otros trastornos a nivel físico como son dolor de cabeza o pesadez, así como consecuencias negativas a nivel mental.
- Menos posibilidades de enfermar. Un buen descanso reparador tiene efectos positivos sobre el sistema inmunitario, que actuará mejor frente a posibles enfermedades.
Igualmente, podemos también encontrar beneficios a nivel fisiológico y funcionamiento corporal como son:
- Cura la inflamación interna. A lo largo del día, el cuerpo sufre inflamaciones a causa del movimiento y el desgaste. Dormir correctamente reduce el riesgo de sufrir afecciones como el Síndrome del Intestino Irritable.
- Regula la insulina. La insulina es una hormona que regula los niveles de azúcar en sangre, disminuyendo la posibilidad de sufrir diabetes. Dormir bien se ha demostrado que quema más azúcar en sangre.
- Disminuye la presión arterial. Ayuda a reducir la posibilidad de desarrollar enfermedades en el sistema cardiovascular. Una alta presión arterial puede tener consecuencias como sufrir trombos o taquicardias.
- Repara vasos sanguíneos. De este modo, reduce enfermedades de tipo renal, del corazón y accidentes cerebrovasculares.
Para experimentar todos los beneficios del sueño, es recomendable descansar toda la noche. Y, sobre todo, es esencial en personas jóvenes, ya que el sueño profundo ayuda a liberar hormonas del crecimiento que son importantes durante la infancia y la adolescencia.
Control del peso mediante el descanso
Una de las mejoras del sueño es reducir el riesgo de sufrir obesidad. Estudios han demostrado que aquellas personas que duermen durante toda la noche requieren menos calorías al día. Esto es debido a que el sueño mantiene el equilibrio sano de las hormonas que queman las calorías. Algunas de ellas son la leptina, que avisa de que el cuerpo está lleno, y la grelina, que indica cuando el cuerpo tiene hambre.
La salud mental y los beneficios del descanso
Dentro de las ventajas de dormir bien está el conseguir una óptima salud mental. Una mala calidad del sueño aumenta el riesgo de sufrir depresión. Se ha demostrado que las personas que padecen insomnio son las más propensas a sufrir depresión y baja autoestima.
Además, el sueño es esencial para la inteligencia emocional y social. Alguien que no duerme lo suficiente no tendrá empatía emocional. Igualmente, dormir mal conlleva a poder sufrir problemas de empatía (reconocer las expresiones y emociones de otras personas), así como la incapacidad para controlar las propias emociones.
En otras palabras, descansar bien supone mantener un óptimo bienestar mental.
El rendimiento y el sueño
Por último, dormir correctamente es importante para conseguir un buen rendimiento en las horas de vigilia. El cerebro se prepara para afrontar el día mientras descansa, formando conexiones neurológicas que ayudan a aprender y recordar la información. En otras palabras, las personas que tienen deficiencia en el sueño tienen más dificultades de ser creativos, concentrarse y razonar.
Incluso aquellas que apenas duermen al día pueden incluso sufrir microsueños, es decir, periodos de tiempo donde el cerebro duerme cuando ha de estar despierto (muchas veces sin darse cuenta). Esto puede ser muy peligroso en situaciones como conducir un coche o trabajar con herramientas que pueden cortar, por ejemplo. Por lo tanto, garantizar un buen descanso por la noche es imprescindible para tu seguridad y de las personas que te rodean.
¿Y cómo conseguir entonces una buena noche de descanso?
Podemos llevar a cabo varias tareas y recomendaciones que pueden ayudar a dormir de forma correcta por las noches, aunque de nada vale si no lo hacemos en un entorno adecuado. Lo importante es usar un colchón cómodo y resistente que nos ayudará a conseguir un descanso tranquilo y profundo. Algunas de las estrategias que podemos realizar para tener un buen descanso:
- No tener en la habitación aparatos electrónicos o apagarlos antes de acostarnos.
- No hacer una siesta de más de 20 minutos de duración.
- Procurar no consumir café o alcohol. Y menos antes de dormir, puesto que son productos que sobreexcitan el cuerpo y dificultan el sueño.
- Realizar actividad física a lo largo del día (nunca justo antes de dormir).
- Intentar tener una rutina de sueño (dormir y levantarse todos los días a la misma hora).
- Evitar comer alimentos y comidas pesadas a lo largo del día. Así mismo, no hacer cenas pesadas durante la noche, ya que obligaremos al estómago a trabajar incluso cuando estemos dormidos.
Como puedes ver, son innumerables los beneficios que podemos obtener si tenemos un buen descanso. Dormir bien tiene múltiples beneficios a nivel físico, mental y emocional. Y esto se traduce en un mejor bienestar de vida. Si no dormimos bien, nuestro cuerpo se resiente y podemos llegar a desarrollar enfermedades mentales y físicas. En Assegur, nos preocupamos por tu salud, por eso te damos las claves para que puedas dormir bien. Sigue nuestros consejos y gana en salud y vida.