Existen remedios caseros para la circulación, pero antes de hablarte de ellos queremos dejar claro que, como con cualquier otro problema de salud, lo primero que debes hacer es acudir a tu médico. Solo él podrá recomendarte un tratamiento adecuado. Dicho esto, te contamos algunas cosas que puedes hacer para mejorar tu circulación sanguínea.
¿Cómo saber si tengo mala circulación?
Cuando la sangre no circula bien por todo el organismo, se suelen sentir una serie de síntomas. Los más comunes son frío, entumecimiento y sensación de hormigueo, sobre todo en las extremidades. Tanto en manos como en pies, y a veces se extiende hasta brazos y piernas.
¿Qué remedios caseros para la circulación puedo usar?
Hay varias causas para que tengamos una circulación pobre. Eliminarlas puede ayudar a mejorar la circulación. Por ejemplo, si tu problema se deriva del tabaquismo, lo primero sería dejar de fumar. Si tienes un estilo de vida sedentario, el deporte deberá ser tu opción. Y si tu mala circulación procede del sobrepeso, perder algo de grasa corporal ayudará. Pero hay personas que tienen mala circulación por herencia genética. Para ellas, y también de manera general, recomendamos los siguientes remedios caseros para la circulación:
1.- Cúrcuma con pimienta negra y aceite
La raíz de cúrcuma se parece mucho a la de jengibre, pero su interior es de un vivo tono anaranjado. Corta dos rodajas finas y machácalas con pimienta y una cucharada de aceite. No solo obtendrás un aliño diferente, fresco y exótico, sino que te beneficiarás del efecto antiinflamatorio y antioxidante de la cúrcuma. También puedes tomar la cúrcuma en infusión.
2.- Zumo natural de uvas verdes y melón
Entre los remedios caseros para la circulación se encuentra este sumo lleno de antioxidantes que se recomienda tomar en ayunas dos o tres veces por semana. Hazlo en una licuadora para librarte de la piel de la uva, si te resulta desagradable. El efecto de estas dos frutas se centra en limpiar de grasa la cavidad de las arterias, lo que ayuda a mejorar la circulación. Eso sí: no esperes resultados inmediatos.
3.- Brócoli al vapor
Otro alimento altamente antioxidante, como todas las verduras crucíferas, es el brócoli. Para aprovechar sus propiedades como remedios caseros para la circulación, hazlo al vapor y procura que quede al dente. Con un poco de sal y aceite crudo es una auténtica delicia. También puedes tomarlo frío en ensalada. Si lo aliñas con cúrcuma y pimienta, tendrás dos remedios en uno.
4.- Remedios caseros para la circulación: ejercicio
El ejercicio moderado es bueno para todo el mundo. No es exactamente un remedio casero, pero procura levantarte de la silla una vez cada hora y mueve manos y pies. Te dejamos este vídeo con movimientos que te ayudarán.
Recuerda comprobar nuestras pólizas de salud para estar siempre bien cubierto frente a cualquier eventualidad.