Si quieres saber cuáles son los mejores alimentos para niños, te lo contamos con una serie de consejos y recomendaciones que te ayudarán a configurar un plan de alimentación para cuidar el valor nutricional de los alimentos que conforman la dieta de tus pequeños. La alimentación, de hecho, es clave no solo en el crecimiento sino en el desarrollo posterior que marcará su salud cuando sean adultos. Por ello, es muy importante poner el foco en este aspecto.
Tips sobre los mejores alimentos para niños
La Asociación Española de Pediatría, en su guía Alimentación Complementaria, alude a los buenos hábitos alimenticios de los más pequeños. Este colectivo profesional recomienda introducir, paulatinamente, alimentos ricos en zinc y en hierro en la dieta de los pequeños. En este sentido, se indica que estos alimentos se tienen que incluir en la dieta de uno en uno dejando pasar unos días. No obstante, recuerda que antes de tomar cualquier decisión relevante sobre la alimentación de tus pequeños es mejor consultarlo previamente con el pediatra o con tu médico de cabecera.
Al margen de estas consideraciones, es muy importante que la comida que prepares para tus niños sea, en su mayoría, orgánica. Esta es la base de una buena alimentación; especialmente, para la de los más pequeños. Sin embargo, cuando los niños empiezan a crecer, se ha de seguir esta tónica con la introducción de alimentos ricos y sanos. Os detallamos a continuación tres alimentos que no deben de faltar en vuestra nevera.
Arándanos. Los arándanos son una potente fuente de energía por su alto valor nutricional. Sus cualidades y sus propiedades ayudan a la memoria y, por tanto, son clave en la potenciación del aprendizaje. Además, son ricos en potasio. Para los más pequeños, los puedes servir en forma de zumo para que los asimilen mejor.
La avena es fuente de proteínas, vitaminas y minerales. Es ideal para los desayunos, pero también para las meriendas. No obstante, no abuses de este alimento con los niños porque es muy rica en fibra. No es recomendable incluirla en la alimentación hasta después del año. Y se ha de introducir poco a poco, igual que se debe de hacer con todos los alimentos.
Y, finalmente, el yogur. No solo porque es rico en potasio, y es un soporte adicional para el crecimiento porque ayuda a fortalecer los huesos. El yogur, además, es más sencillo de digerir; por tanto, los niños absorben con más facilidad todas las propiedades de este alimento.
Deseamos que estos consejos te hayan orientado para que cuides al máximo la alimentación de tus peques. Si quieres saber más sobre temas vinculados con tu salud y la de tus seres queridos, te proponemos visitar nuestro blog.