Para disfrutar de lugares recónditos y paradisíacos no es necesario viajar lejos. La Costa Brava se caracteriza por la belleza de sus playas y calas, con aguas limpias de tonalidades turquesas y fina arena blanca. Si quieres disfrutar de parajes con esta descripción, te contamos cuáles son las mejores calas de Cataluña.
Las mejores calas de Cataluña que debes visitar
La Costa Brava tiene una longitud de más de 200 kilómetros de carretera, a lo largo de la cual se pueden divisar hermosos paisajes. Pero también, esconde multitud de calas y playas que no siempre son de fácil acceso. De ahí que sean excelentes para quienes desean lugares aislados.
Cala Bramant
Muy cerca de la frontera con Francia se encuentra la Cala Bramant; concretamente entre Colera y Llançà. Para llegar a ella se puede tomar el paso marítimo de esta última localidad y continuar por el camino de ronda hacia el norte. Este pequeño rincón lo encontrarás antes de alcanzar Cap Ras. Su encanto reside en que se asemeja a una piscina de gran tamaño, rodeada por rocas de gran altura por las que entra el mar. Un lugar tranquilo para quienes desean alejarse de las aglomeraciones.
Illa Roja
Esta cala debe su nombre a una roca de gran tamaño que se encuentra en medio de la misma. Sus tonalidades rojizas resaltan sobre el azul claro del mar, y le dan a este lugar un aspecto de postal. Forma parte del municipio de Begur y está ubicada en el camino de ronda que lleva a la playa de Sa Riera.
Tiene aproximadamente 120 m de longitud y 20 de ancho. Para acceder hay que seguir unas escaleras con una inclinación considerable, de ahí que no sea apta para todos los públicos y sea ideal para quienes quieran más intimidad.
Cala de la Corcollada
Entre Sant Feliù de Guìxols y Tossa de Mar, la Cala de la Corcollada o del Senyor Ramón está ubicada en el desvío del kilómetro 35. Con 350 metros de longitud, es una de las más bellas de toda la costa, cuyo encanto se acrecienta a medida que nos acercamos a ella por el sendero.
Tiene todo lo necesario para ser una de las mejores calas de Cataluña; aguas turquesa, fina arena y acantilados que le confieren tranquilidad. Como inconveniente para algunos, no cuenta con duchas ni chiringuitos, así que hay que ir con provisiones. Se permite también la práctica opcional del nudismo.
Cala Estreta
Ubicada en Palamós, debe su nombre a su tamaño, y es que tiene apenas 100 m de longitud que se encuentran divididos por un saliente conocido como la Roja. El entorno es completamente natural, ya que para llegar hasta allí es necesario caminar cerca de media hora desde la playa de Es Castell. Los puntos a favor son que el paseo es sencillo y que ofrece como recompensa una cala con poca afluencia de gente.